Se fue un compañero, un amigo; pero por encima de todo, un hombre bueno. El virus, que hoy nos tiene cercados a todos, y que nos ha hecho ser aún mas conscientes de nuestra vulnerabilidad, se lo ha llevado. Descansa en paz.
Jesús, si tienes ocasión, ve preparandonos un Ateneo para cuando, también, lleguemos nosotros.